El verano ya está aquí y con él llega uno de nuestros principales reclamos, ¡los baños de sol! Por desgracia, el periodo vacacional y las largas estancias en la playa también conllevan una mayor exposición de nuestra piel a los rayos UV. Por suerte, y no todo iba a ser negativo, cada vez existe una mayor concienciación sobre la importancia de proteger, precisamente, dicha piel del cáncer y de otras muchas patologías dermatológicas. En este artículo nos vamos a centrar en el cuidado de una de las zonas más delicadas de los chicos, su cara. Aportando, por el camino, diversos consejos para tenerla protegida y nutrida durante los tan temidos meses estivales. Y es que el cuidado facial masculino resulta tan importante como el femenino para mantenernos sanos y retrasar el envejecimiento prematuro de la piel.
Un rostro prefecto
El primer paso antes de comenzar ningún tratamiento pasa por saber qué tipo de piel tenemos. Y es que del tipo de piel (seca, grasa o intermedia) van a depender los cuidados llevados a cabo sobre nuestro rostro. Algo que también afectará a cuestiones como posibles marcas, cicatrices, manchas o cualquier tipo de hipersensibilidad cutánea.
El sudor, las células muertas o la suciedad son algunos de los principales responsables de la mayoría de imperfecciones, como espinillas o puntos negros, que aparecen en nuestro rostro. Es por ello que la correcta limpieza e hidratación siempre debe ser el primer paso para lucir el mejor, y más saludable, aspecto. Y para ello resulta importante combinar diariamente (mañana y noche) los lavados generosos con agua con un limpiador con el que tonificar, limpiar los poros y eliminar el exceso (o cubrir la falta) de grasa. La crema hidratante con agua termal o la crema facial antifatiga son excelentes opciones.
Protección frente al sol
Si vas a optar por largas exposiciones al sol recuerda que no basta con hidratarte, ya que vas a necesitar un protector solar adecuado para el grado de protección que requiera tu piel. Y sí, pese a las leyendas urbanas, también es necesario usar dicho protector en el rostro.
Los cuidados no se limitan al “durante” sino también al “después”. Es por ello que los tratamientos revitalizantes (aftersun) también son fundamentales para calmar la epidermis masculina. Por otro lado, aunque no se trate de un tratamiento en sí mismo, utilizar una espuma o crema de afeitar nutritiva ayuda a mitigar los efectos causados por la cuchilla. Algo que, al final, repercute en una cara menos reseca y dañada.
Procura usar productos de uso diario y amplio espectro. La emulsión ultra-ligera con factor de protección SPF es perfecta para su uso a diario por sus propiedades revitalizantes y refrescantes.
Una piel cuidada y limpia es una piel sana
Puede que para muchos resulte obvio, pero cuidar nuestra piel va mucho más allá de una simple cuestión estética. Y es que un correcto cuidado facial masculino repercute en nuestra propia salud. Consiguiendo, ya de paso, una piel mucho más luminosa, nutrida, limpia e hidratada y, lo más importante, evitando multitud de enfermedades relacionados con la propia piel.
