Toxina botulínica para quitar las arrugas del entrecejo y la frente de hombres. Cada vez aumenta el número de hombres que se someten a este tipo de tratamiento con el fin de eliminar algunos de los primeros signos de la edad que en el caso de los hombres suelen concentrarse sobre todo en la frente.
Cuando se habla de tratamientos estético con respecto al hombre, se suele pensar siempre en técnicas para por ejemplo definir la mandíbula, pero también muchos hombres desean eliminar sus primeras arrugas y con ello que el paso de la edad no sea tan evidente. Es entonces cuando es posible que entre en juego el botox y su capacidad para eliminar signos de expresión.
Qué es la Toxina botulínica
La toxina botulínica es un fármaco que inhibe temporalmente la acción de los músculos mímicos del rostro reduciendo la formación de líneas de expresión. Hay siete tipos de neurotoxina botulínica (A, B, C1, D, E, F y G) derivadas de cepas de la bacteria Clostridium Botulinum altamente seleccionadas en laboratorio. Los utilizables en humanos y actualmente en el mercado son tipo A (Vistabex, Vistabel, Botox, Botoxin, Dysport, Azzalure y Bocouture) y tipo B (Myobloc y Neurobloc).
En sus inicios, la toxina botulínica se usaba en medicina para prevenir espasmos neuromusculares de los párpados y para corregir estrabismo, pero a partir de 1987 comenzó a usarse en Estados Unidos también en el campo de la cirugía estética. En España el uso de la toxina botulínica fue limitado a tres fármacos entre los que está Vistabex que es quizás, junto al Botox, uno de los más usados en el mundo para el tratamiento de las arrugas glabelares en pacientes de edad no mayor mayores de 65 años siempre que el preparado sea inyectado por un especialista en cirugía plástica, dermatología, neurología o cirugía maxilofacial. Las otras dos toxinas botulínicas igualmente válidas son las llamadas Azzalure, producida por Galderma, y ??Bocouture, producida por Merz.
Toxina botulínica para quitar las arrugas del entrecejo y la frente de hombres
La toxina botulínica está indicada para el tratamiento de las líneas de expresión (dinámicas) de la parte superior del rostro (frente y región periocular) , aunque el fármaco ha sido aprobado únicamente para el tratamiento de las líneas glabelares (es decir, las arrugas que se forman entre las cejas).
Otra indicación importante para el uso de la toxina botulínica es la “hiperhidrosis”, es decir, la sudoración excesiva en axilas, manos o pies que puede eliminarse de forma eficaz con este tratamiento, pero nosotros nos vamos a centrar en la intervención para eliminar las arrugas del entrecejo y la frente que suelen ser las primeras en aparecer con la edad.
¿Cómo se utiliza la toxina botulínica?
La toxina botulínica se inyecta en dosis muy pequeñas en las regiones afectadas mediante una jeringa equipada con una aguja muy fina.
El tratamiento con Botox es ambulatorio, sin hospitalización y sin anestesia y tiene una duración de unos 15-20 minutos. Durante el tratamiento el paciente puede tener una sensación de hormigueo como la que deja un pinchazo. Después de la infiltración, la cara se enrojece ligeramente solo en los puntos donde se realizó la inyección y solo durante unos minutos. Ocasionalmente puede aparecer un pequeño hematoma pero tiende a reabsorberse a los pocos días. Después de 10 minutos de infiltración, es posible volver al trabajo y realizar actividades diarias normales. Se recomienda esperar unos diez días antes de exponerse al sol.
¿Qué tipo de anestesia se practica?
El tratamiento con Botox no requiere ningún tipo de anestesia ya que es prácticamente indoloro.
¿Dónde se realizan las inyecciones?
Las inyecciones de toxina botulínica se realizan dentro de los músculos mímicos y no dejan marcas visibles.
¿Cuánto dura el tratamiento con la toxina botulínica?
El tratamiento con toxina botulínica es reversible, dura unos minutos y no deja secuelas visibles que impidan la reanudación inmediata de las actividades diarias. Esto explica el gran éxito y rápida difusión de este nuevo tratamiento en el campo estético.
¿Qué tipo de resultado se puede conseguir con este tipo de tratamiento?
Al inhibir temporalmente la acción de los músculos mímicos faciales, la toxina botulínica reduce la formación de líneas de expresión. El efecto de relajación de los músculos mímicos y la atenuación de las arrugas comienza unos 4 días después del tratamiento y dura unos 3-6 meses, tras los cuales es posible repetir el tratamiento periódicamente. El resultado estético en las regiones tratadas es tan satisfactorio que en los últimos años la toxina botulínica prácticamente ha sustituido a la cirugía de lifting de frente.
Cuánto cuesta este tratamiento
La toxina botulínica tiene un costo que depende de la cantidad de producto utilizado. Para pequeñas zonas tratadas , el coste puede variar desde los 250€ hasta un tratamiento facial completo que ronda los 500€ . El paciente debe asegurarse de que el médico utilice una de las tres toxinas botulínicas autorizadas por ahora en España que son Vistabex, Azzalure y Bocouture.
¿Es segura la toxina botulínica?
Sí. En todos estos años nunca ha habido efectos secundarios graves por el uso de este fármaco, pero como con todos los fármacos siempre es posible que el paciente desarrolle alergias e intolerancias a la toxina oa algún excipiente.
¿Mis arrugas empeorarán si interrumpo el tratamiento?
Dado que el Botox inhibe temporalmente la contracción de los músculos mímicos, las líneas de expresión comenzarán a reaparecer gradualmente si se interrumpe el tratamiento.
¿El Botox altera la fisonomía del rostro?
Botox tiene el efecto de relajar solo el músculo en el que se inyecta y se usa en cantidades mínimas adecuadas para el tratamiento de surcos faciales. Por ello, las inyecciones de una cantidad adecuada de Botox garantizan una expresión natural y no alteran la fisonomía del rostro.
¿Cuál es la diferencia entre Botox y rellenos?
Botox está indicado para el tratamiento de las líneas de expresión (arrugas dinámicas) provocadas por la contracción de los músculos faciales. Los rellenos, por su parte, se utilizan para la corrección de las arrugas estáticas debidas al envejecimiento de la piel, que con el tiempo tiende a perder su capacidad de regeneración del tejido subcutáneo creando depresiones. Los rellenos se utilizan para rellenar estas depresiones levantando la piel y suavizando las arrugas.